El mural de Talamantes refleja su tradición del dance que se remonta a tiempos inmemoriales.
En honor a su patrón, San Miguel, el dance de Talamantes dejó de realizarse debido a la falta de jóvenes que conllevó el éxodo rural de los años setenta.
Este mural rinde homenaje a aquellos vecinos que viéndose obligados a emigrar nunca perdieron el vínculo con su localidad de origen y se implicaron en la promoción y recuperación de esta tradición, siendo especialmente relevante la labor llevada a cabo por el Centro Cultural de San Miguel
El día de la fiesta, los mozos bajan al santo desde su ermita, siendo llevado a hombros por los mayordomos acompañados de cuatro roscones.
Se baja en procesión con el pasacalles hasta la iglesia, dónde continua la festividad con la representación del dance y el paloteao. Después hay una bonita costumbre de repartir pastas para los danzantes y espectadores. Al día siguiente se lleva de nuevo el santo a la ermita
Este mural ha sido realizado por Ele Man.