Es uno de los rincones más típicos y característicos del casco antiguo de Mallén. Es muy notable la disposición urbana del palacio como fondo a una plaza cerrada en tres de sus lados por muros de semejante naturaleza (Antigua plaza del Burgo).

La fachada, de ladrillo, presenta la portada en el eje de la composición. Anteriormente adintelada fue transformada tras una restauración en medio punto. Sobre ella se sitúa el escudo y un gran vano con un balcón corrido apoyado en siete ménsulas metálicas. Dos grandes rejas de forja se sitúan también en la fachada en el segundo piso, una de ellas en un muro donde el edificio se dispone perpendicularmente. Situado en la calle Tudela.