Iglesia de Nuestra Señora de la Piedad (Ainzón)

Se construyó en la Edad Moderna-S. XVI durante el Renacimiento la torre Zona afectada:  Torre. Más tarde, durante la Edad Moderna-S. XVII-Segunda mitad del Barroco se sustituyó la primitiva iglesia. Más tarde sufrió una ampliación en la Edad Moderna-S. XVIII-Primera mitad.

Se creó un segundo crucero por el levantamiento de dos nuevas capillas laterales de gran profundidad.

El edificio presenta planta de cruz latina con nave de cuatro tramos cubierta con cuerpo de bóvedas de lunetos. El crucero se cubre con bóveda elíptica ciega.

A finales del siglo XVIII se crea un segundo crucero por el levantamiento de dos nuevas capillas laterales de gran profundidad.

Las capillas añadidas a los muros laterales son de planta centralizada. Todas estas capillas se comunican entre sí originando una circulación paralela a la nave que añade complejidada la espacio interior.

En los pies se incorpora un pórtico de planta semioctogonal, cubierto con cúpula gallonada; el coro se sitúa en esta zona.

Exteriormente este pórtico presenta tres planos iguales separados por pilastras en cada uno de los cuales se sitúa una portada inferior con arco escarzano, un óculo superior y se remata con una cornisa, en forma de escocia.

En la imagen exterior del templo destaca el escalonamiento de los volúmenes con muros de ladrillo.

Destaca también la multiplicidad de remates de linterna de las capillas laterales, el cimborrio de la nave central, de planta cuadrada y la torre, que se remonta al siglo XVI.

Esta es de planta cuadrada con un primer cuerpo ciego y los dos superiores con pares de vanos, los primero ciegos y los superiores calados, entre impostas de ladrillo resaltado.

Fuente: SIPCA

San Severino

Fray José Alberto fue el donante de esta preciada reliquia que le había sido entregada por el Papa Clemente XIII, al ser elegido Superior de la Orden del Carmelo el 21 de mayo de 1768, remitiéndolo después a su localidad natal, Ainzón, junto con otros importantes regalos que llegaron el 5 de septiembre de 1769. Este año se conmemora, por lo tanto, el 250 aniversario de su llegada.

El cuerpo había exhumado de las catacumbas de Santa Priscila de Roma en 1768 y la fecha es importante por las razones que vamos a exponer.

Mariano Villabona, al escribir su libro, explicó que existen varios mártires con el mismo nombre de Severino. Entre ellos, el único que podría ser identificado con las reliquias de Ainzón fue un soldado romano, martirizado bajo la persecución de Diocleciano, junto con otros tres compañeros, en la vía Labicana de la capital del Imperio. Pero las dificultades encontradas a la hora de precisar sus hagiografías e incluso sus nombres, hizo que, en la última edición del Martirologio Romano, fueran eliminados, lo que no quiere decir que el culto que se les venía tributando careciera de fundamento.

Cuando el Papa Clemente XIII manda extraer de las catacumbas un cuerpo, en cuyo sepulcro aparece el nombre de “Severino”, para entregárselo a fray José Alberto Ximénez, tiene el convencimiento de que es el del mártir al que nos estamos refiriendo y, por ello, cuando el General de los carmelitas manda darle la forma con la que es enviado a Ainzón, lo viste como un soldado romano, profesión del mártir.

Fuente: Centro de Estudios Borjano

Las campanas de la Iglesia de Ainzón

Son cuatro las campanas que desde principios del siglo XX hasta la actualidad hay en el campanario de la iglesia de Ainzón. El material con el que están fabricadas es el bronce y se les conoce con los nombres de  TIN o Sebastiana, TON, TAN o CHAN y CAMPANICO. En todas hay una inscripción donde figura el nombre de la campana, quien la hizo, el que la encargó y el año de su fabricación.

Antiguamente también había una carracla de madera que se utilizaba en los oficios de la Semana Santa.

Hasta el año 1975 las campanas se tocaban manualmente,  bien con cuerdas y cadenas desde abajo del campanario, o bien subiendo a este a bandearlas o voltearlas con las manos. A partir de entonces se electrificaron y tocarlas a mano cayó en desuso.

Otra variación importante es que hasta la última reforma de la torre de la iglesia en 1991, las campanas estaban situadas en los arcos o ventanas que hay para esto. En dicha obra las campanas se metieron al interior del campanario.

También cuando se tocaban manualmente el yugo o contrapeso era de diferente material al que es desde que se mueven por medios eléctricos. El del Tin era de madera y los del Ton, Tan y Campanico eran de cemento. Ahora son todos de hierro.

En el Libro de Gestis de la Parroquia encontramos que en 1689 se funde la campana pequeña en Fuendejalón (actualmente desaparecida), costó 24 libras jaquesas y 15 sueldos siendo Justicia Andrés Duarrez Surradas, Andrés Briz, Domingo Pérez y Blas Liarte Manor.

La más antigua es la campana Tin o Sebastiana que data de 1831.

Las Tan y Campanico están fabricadas en 1924. Se sabe que estas dos fueron hechas a partir de la fundición de una antigua campana muy grande que había en el interior del campanario. Fueron realizadas por D. Pablo Del Campo Alvarado, campanero santanderino afincado casi toda su vida en Ambel.

La campana Tan es la más grande y el sonido más grave lo tiene la Ton. Por el contrario la más pequeña y con el sonido más agudo es el Campanico.

Fuente: José Antonio Bellido Alcega